8/2/12

La maravilla de la caverna y el pusilánime.

Hace algún tiempo en un lugar ostentoso por su carencia de rigor escénico se encontraba un ser medio animal medio humano que no conocía ni la luz ni las sensaciones. Un buen día este ser se preguntó porqué siempre experimentaba el mismo espectro visual y porque cada día sentía el calor de los mismos contrastes. Entonces brillante ingenioso, tanteándo el lugar en el que se hallaba con sus manos, fue poco a poco adivinándo la forma de su reducto habitáculo y descubrió que se encontraba en una estancia rocosa y con sus garras, comenzó a crugir las piedras husmeando el olor a azufre y óxido de los minerales que le rodeaban, quería salir de aquel lugar. No entendía el porqué y muy lejos de saber el cómo, sólo quería salir, su vida había sido siempre la misma, la misma intensidad cada día, cada segundo, cada golpe de vista, pero en ese momento ya sabía más, había descubierto que podía aumentar su techo, que su lugar estaba cerrado y sabía que era por algo.

 


Si quieres saber el resto comenta... ;)                                                   

1 comentario:

Albuska dijo...

Y entonces...comenzó a escarbar, sin tener ni idea de con qué podría toparse. Total, no importaba, siempre sería mejor , no? =)